Jorge Herrera en Línea

RATÓN O LEÓN

¿Y para qué sirve ser bueno?, le preguntó cierta vez, alguien que se consideraba un piola bárbaro, que para todo tenía respuesta rápida, a otro joven, que deseaba salir de esa actitud tan conocida en la sociedad argentina y que tanto mal nos está ocasionando.

Reflexionando sobre el tema, siendo bueno se refuerza la propia condición humana, y el piola puede preguntar, y eso, ¿para qué sirve?. Sólo los siervos sirven y acá se trata de ser libres. Cuanto más feliz y alegre una persona se siente menos ganas tendrá para ser malo.

Tal vez, se trate de fomentar todo lo posible la felicidad de los demás en lugar de hacerles desgraciados y por lo tanto propensos al mal. ¿Cuántos adolescentes faltos de orientación, de contención afectiva y efectiva se pierden, golpeándose en la vida con el abandono de sí mismo, con el consumo de la droga, etc., padeciendo la mayor desgracia de todas, la de verse tratados sin amor.

Aunque, me atrevo a decir, que muchos piolas en esta pródiga Argentina, para estar contentos necesitan no enterarse de los padecimientos que abundan a su alrededor: personas enfermas, frágiles en su salud, miseria espiritual y material, dificultades temporarias, malentendidos, etc. Pero, la ignorancia, es también una forma de desgracia, que no exime a nadie.

Savater, en Ética para Amador, dice:
1. El que ha nacido para ratón, se pregunta ¿qué me pasará?, y el que ha nacido para león, se pregunta ¿qué haré?
2. El ratón quiere obligar a los demás a que le quieran para así ser capaz de quererse a sí mismo y el león se quiere a sí mismo por lo que es capaz de querer a los demás.
3. El ratón está dispuesto a hacer lo que sea contra los demás para prevenir lo que los demás pueden hacer contra él, mientras que el león, considera que haciendo el bien a los demás, él se beneficia

Por lo cual, pareciera paciente lector, que se trata de ser ratón o león. Y esto significa, al menos deseo compartirlo con ustedes, reconocer a las personas como semejantes, a veces es bueno ponerse en su lugar (empatía), para que la comunicación fluya del yo al tú y viceversa.

Aunque yo sea viejo y el otro joven, aunque yo sea varón y el otro mujer; aunque yo sea negro y el otro blanco, aunque yo parezca que sea tonto y el otro listo, aunque yo esté enfermo y el otro sano: soy humano y nada de lo que es humano me es ajeno. Se trata de aprender a vivir humanamente, con otros semejantes. Lo que hace humano a la vida es estar.

Para finalizar, lo que a la ética le interesa es cómo vivir bien la vida humana, la vida que transcurre entre humanos. Ahora bien, si uno no tiene idea de la ética, lo que pierde o malgasta es lo humano de su vida. Por lo tanto, aspiramos y lo expreso en plural, porque somos muchos que en el silencio de todos los días, aspiramos a VIVIR CON ÉTICA, a pesar de los errores y las limitaciones en una Argentina solidaria, como la soñaron nuestros padres.

¡Gracias por estar!

Jorge A. Herrera
Educador contemporáneo